La nomofobia es como se llama al miedo exacerbado que produce quedarse sin poder utilizar un dispositivo móvil. Quien padece este trastorno, sufre una sensación de ansiedad que le conduce a una necesidad imperiosa de estar conectado de nuevo, con una conducta semejante a la de otras adicciones. Afecta sobre todo a los nativos digitales. La persona que lo padece se llama nomofóbico.
Dado que aún no es un término incluido en el Diccionario de la lengua española (DLE), lo correcto debería ser escribirlo en cursiva: nomofobia. No requiere comillas (ya la cursiva indica su condición) ni por supuesto mayúscula inicial.